Vuelvo a Cinéculas con una película que consigue alejarse de las típicas comedias familiares y dejar un buen sabor de boca en el espectador.Pequeña Miss Sunshine es la historia de una niña que, rodeada por su excéntrica familia (un abuelo drogadicto, un padre obsesionado con el éxito, un hermano empeñado en no hablar, un tio con tendencias suicidas y una madre que se esfuerza en unir a su familia) emprende un viaje hacia California en la destartalada furgoneta familiar para participar en el concurso de belleza que da título a la película.
La pequeña Olive, interpretada por Abigail Breslin, sueña con convertirse en una reina de la belleza y acabará dando, sin saberlo, una lección, no solo a toda su familia, sino a todo el público en la sala.
La película nos muestra una familia que se esfuerza por encajar y acaba por descubrir lo especial de ser diferente. Abundan las situaciones cómicas, y destaca en especial el sarcasmo del tio de Olive, interpretado por Steve Carell. Llama la atención la relación entre Olive y su abuelo, un personaje extraño, pero importante en el desarrollo de la historia.
En mi opinión, ésta es una de esas producciones que, tras verlas, te hacen respirar de manera diferente y ver las cosas des de otro enfoque.
En definitiva, me parece muy recomendable. Una buena manera de pasar alguna de las tardes de verano que se avecinan.
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